Si hay algo de la casa donde definitivamente no vale la pena gastar cantidades exorbitantes de dinero, sin duda alguna es en el escusado. Se imaginan, preguntarle a alguien que si puedes pasar a su baño y que conteste, “sí claro pero por favor con mucho cuidado que me costó $128,000 dólares”.
Aquél que responda eso será porque adquirió el inodoro que diseñó la joyera japonesa Ginza Tanaka para la compañía de baños Lixil, y que tiene 72,000 cristales de Swarovski incrustados. Así como lo oyen, aunque parezca demasiado raro para ser verdad.
Esta “pieza” se presentó en el International Kitchen & Bathroom Expo 2015 en Shanghai, donde evidentemente llamó la atención de cientos de visitantes a la feria.
Se tardaron un mes en hacerlo pero a pesar de todos los cristales que tiene, este no es el inodoro más caro del mundo. El más costoso era uno hecho de oro sólido, que tuvieron que derretir y utilizar en la crisis financiera de 2008.