Por Alba Aguilar
Los amantes del vino saben que se tiene servir de una manera especial y que se debe de tomar a la temperatura exacta. Krups también lo sabe, y es por eso que desarrolló un dispensador que combina ambas cualidades para poder disfrutar de esta bebida de una manera perfecta.
Tiene dos cámaras enfriadoras con capacidad para dos botellas. Se puede controlar la temperatura entre los 7° y 68° Fahrenheit. Cada una tiene integrado un aireador para el proceso de ‘respiración’ del vino, y al mismo tiempo cuenta con agentes presurizadores para retrasar su oxidación.
Cuenta con funciones preestablecidas de acuerdo a cada tipo de vino, pero son completamente personalizables para que lo disfrutes a tu propia manera.