Disco de la semana: Ants From Up There de Black Country, New Road

En 2022 la idea de estar viviendo un momento histórico ya no suena tan emocionante como hace dos años, sin embargo, hablando en términos artísticos, parece incluso más raro darse cuenta que estamos viendo en tiempo real la llegada de algo magnífico.

Black Country, New Road llegó a la escena como un meteorito estrellándose en la Tierra, sin avisar con estruendo y dejándonos sin saber qué hacer. Un septeto de jóvenes que apenas pasan los 20 años, con canciones de más de cinco minutos donde mezclan el rock, post-punk, la tradición judía del klezmer, jazz y mucho más demostrando que no les importan las reglas del juego que impone el algoritmo y que incluso en pleno 2022 la música puede sonar fresca y original sin ser parte de un nicho específico, Black Country, New Road es la definición de una verdadera banda de rock sin ser necesariamente eso.

En muy poco tiempo, la banda ha formado un mito sobre sí misma y es que aunque se formaron desde 2018, su debut fue en 2021 en medio de la pandemia, por lo que sus shows en vivo como una banda famosa son casi inexistentes. Ahora, para Ants From Up There, el anuncio de que su vocalista, Isaac Wood, dejaba la banda hizo que el disco fuera un nuevo lanzamiento que simplemente nunca podremos escuchar en vivo tal como debió sonar originalmente.

Mientras For The First Time tiene un intro de casi seis minutos, este disco lo reduce a 54 segundos, alejándose mucho de la fórmula que ya tenían establecida y cumpliendo con su parte del trato de que son una banda en constante evolución y que no se quieren definir por un sonido específico. Chaos Space Marine mantiene la esencia del grupo al no poder ser encasillada en un género específico, pero su estructura se siente mucho más amigable por la audiencia. Sin duda es una canción que puede sonar en el radio y quizá para algunos supone la cumbre de lo que BC,NR ha hecho hasta ahora.

Es ahí donde encontramos el poder de una banda de siete integrantes. Las letras de Wood los definen como verdaderos artistas que usan metáforas a veces inpenetrables para mostrarnos parte de su universo, pero al crecer, el resto de la banda se instaura como protagonistas tan relevantes como el vocalista, demostrando que son un caos estructurado que sobresale por darnos lo que no sabíamos que necesitábamos.

Concorde incrementa en tiempo y muestra la verdadera evolución de la banda. Pueden mantener sus canciones largas, pero ahora se toman tiempo para construir y desmontar sin perder el ritmo. Mientras la música cambia, Wood explora temas de crecimiento y soledad en letras que nos hacen entender el enorme hueco que deja con su ausencia, pero al mismo tiempo nos permiten simpatizar con todo lo que puede estar pasando.

El disco nos da éxito tras éxito, no en un sentido comercial, pues seguramente nunca verás estas canciones en el Top 200 de Billboard, pero cuando tanto la crítica como los fans avalan cada una de las canciones de un disco, sabes que estás viviendo algo histórico. En años recientes esto ha pasado con artistas de la talla de Kendrick Lamar o Lana Del Rey, pero que un grupo de jóvenes con una banda de post-punk (o el género en el que erróneamente tú los quieras encasillar) lo hagan nos remite a los primeros discos de Pink Floyd o Talking Heads. Sí, BC,NR es así de bueno.