Por Mary Gaby Hubard
Joaquín Rodríguez comenzó como un buzo de cuevas en Tulum y la Riviera Maya. Las filmaba y hacía documentales de los mayas ya que sentía una enorme fascinación por esa cultura. Siempre fue muy autodidacta.
“Vengo de una familia donde mi abuelo era productor de cine en la época de oro del cine mexicano, pero en realidad yo lo aprendí de manera muy empírica”. Se mudó a Estados Unidos y ahí hizo su primer largometraje como productor y su formación fue haciendo cine, más que estudiándolo. “Primero quería entenderlo todo mejor, antes de entrar de lleno a dirigir, pero siempre he querido hacer cine que te diga algo”.
Así, con la intención de hacer cine que transmitiera algo al espectador nació Decadencia. “Es mi quinta película, es un drama erótico. Me mudé a vivir en Guadalajara, con esta historia en la mente. Son muchas vivencias personales, esto no quiere decir que algunos de los atropellos que pasan ahí los haya hecho yo. Pero sí cosas que he visto en mi vida”.
Al llegar a México, después de tanto tiempo de hacer cine en Estados Unidos Joaquín se topó con “un México que tiene un Instituto Mexicano de la Cinematrografía que yo no entiendo cómo fueron aprobados. Hay personas a las que les dan 20 millones de pesos, que alomejor para los presupuestos norteamericanos es una propina, pero que para México es mucho dinero. Podrían hacer genialidades, porque además hay miles de historias interesantísimas. México da para lo que quieras. Ve esta ciudad, es la más social del mundo”.
En nuestro país, el director buscó financiamiento privado y se decidió a hacer Decadencia. “Decadencia es una película que a pesar de su contenido sexual es bastante limpia. Lo más que vas a ver es un topless. Visualmente es muy rica, tiene un mensaje muy importante”.
Es una cinta sobre la importancia de la mujer, sobre el respeto que merecen y el importante papel que juegan en la sociedad. “Yo soy un director muy feminista. Siempre he vivido muy en favor de la mujer. El mundo ideal, me lo imagino manejado por mujeres, porque yo no veo a una mujer violando, haciendo guerra, asaltando. Para mí es muy difícil ver a la mujer en cosas que el hombre está probado que somos los peores animales”.
Entonces, Decadencia es de un depredador. De un tipo que tiene los recursos, el físico y el intelecto para manipular a una mujer. A la que sea. “Encuentra a una víctima, que es una chavita que vive una vida normal. Pero busca una comodidad financiera fácil, y así se va dejando manipular poco a poco”.
“Esto es algo que parece una historia de amor, pero tiene una curva de decadencia con una curva bastante pronunciada. Es un tipo guapo, muy seguro de sí mismo, muy asertivo, pero es muy sencillo. Lo cual es muy atractivo en cualquier persona. Es como un geek millonario, otro tipo de millonario, es un chavo que la hizo y es galán pero trae un rollo de trastrorno sexual por lo que vio a su madre hacer en la infancia“.
Es una película muy cuidada, con valores de producción altísimos, con una excelente calidad de fotografía. Es cien por ciento mexicana. Con un valor de producción altísimo. Desafortunadamente, todavía no tiene fecha de estreno, pero esperemos que muy pronto tengamos noticias y la podamos ver en todas las pantallas de cine mexicano porque vale muchísimo la pena.
Twitter: @MGHUBARD