Daft Punk se separó en 2021 pero dos años después la banda es más importante que nunca. Hace unos meses Thomas Bangalter reveló que el duo decidió decir adiós por distintas razones, pero que una de ellas era la manera en que la tecnología había afectado el ímpetu de música de los “robots”.
La llegada de plataformas de música que cada vez hacían más evidente un ecosistema sonoro un tanto genérico alejaron a los pioneros de la música dance en Francia a buscar nuevos horizontes. Por ejemplo, Bangalter se alejó por completo de los sintentizadores para adentrarse en instrumentos acústicos y crear música nueva que casi se siente como la antítesis de Daft Punk.
Poco después, la banda volvió a ser tendencia por unas extrañas coordenadas que te llevan a distintos puntos específicos del planeta (entre los que se incluye el Zócalo de la Ciudad de México). Coincidiendo con el décimo aniversario de su último disco de estudio, Random Access Memories, las coordenadas que incluían la fecha del 12 de mayo resultaron ser para una experiencia de realidad aumentada en conjunto con Snapchat.
La ironía de una banda que se aleja de la música electrónica, pero se mantiene en las tendencias tecnológicas nos muestran que Daft Punk, si bien es receptivo a los avances a su alrededor, supo cuándo alejarse de una industria que ya no es la misma en la que formaron sus mejores hits.
Para nada estoy diciendo que la banda no es capaz de crear música tan emblemática como lo hicieron a inicios del siglo XXI. Todos sabemos de lo que son capaces e incluso si RAM no fue el disco trascendental que muchos pensaban que sería, tiene himnos que resuenan una década después. A lo que me refiero es que la misma banda llegó a la conclusión de que su historia había terminado de manera natural.
Daft Punk se formó en París en 1993 por Guy-Manuel de Homem-Christo y Thomas Bangalter. Desde sus inicios se convirtieron en uno de los exponentes de la música Dance. A finales de la década de 1980 y principios de los 90s, la música electrónica aún era un género en crecimiento. En ese momento, la escena de la música house francesa comenzaba a ganar tracción, caracterizada por sus ritmos repetitivos 4/4, líneas de bajo rítmicas y el uso de sintetizadores, máquinas de ritmos y samplers, estaba volviéndose cada vez más popular.
Al mismo tiempo, fue el período en el que la escena británica de “acid house” y rave estaban teniendo una influencia significativa en la escena musical europea, por lo que solo puedes imaginar la manera en que la música estaba viajando entre fronteras y sin duda era cuestión de tiempo antes de que alguien encontrara la fórmula perfecta para hacer bailar a todos.
Antes de Daft Punk, Homem-Christo y Bangalter estaban en una banda de rock llamada Darlin’ junto con Laurent Brancowitz (quien luego se convirtió en miembro de Phoenix). Sin embargo, después de una crítica negativa en la revista de música británica Melody Maker, que describió su música como “una estridente tontería punk”, disolvieron Darlin’. Viendo el potencial en la escena de la música electrónica, de Homem-Christo y Bangalter decidieron formar un nuevo grupo, utilizando el insulto de la crítica como el nombre de su nueva banda, y así nació Daft Punk.
Su álbum debut, “Homework” (1997), fue un lanzamiento emblemático al mezclar elementos de house, techno, acid y funk de una manera única. Es difícil poner en perspectiva la importancia de la banda cuando solo publicaron cuatro discos de estudio oficiales (existen discos en vivo, remixes y bandas sonoras, pero su trayectoria real se resume en cuatro álbumes), pero es necesario escuchar cada uno para entender la evolución de la música electrónica.
Su música continúo una evolución orgánica en un mundo de sintetizadores. La industria de la música no sería la misma de no ser por Daft Punk. Desde Justice, Pharrell Williams, The Weekend, Porter Robinson, LCD Soundsystem, Skrillex y más. La música que crearon en estas décadas hizo que otros artistas encontraran en distintos géneros la capacidad de transformar lo que había en el pasado.
Aunado a eso, toda la estética y el arte que rodeó a la banda la hicieron crecer comercialmente, volviéndola más popular que a mucha de su competencia. Afortunadamente nada de eso interrumpió nunca con la calidad de su música, que lamentablemente dejaron de entregarnos hace una década.
Daft Punk no necesita probar nada, pero los fans siempre nos emocionaremos con cualquier noticia y albergaremos la ilusión de que un día, el dúo francés se vuelva a poner los cascos de robot y nos regale algo nuevo.