Por Mary Gaby Hubard
El automóvil presidencial, como se podrán imaginar es una limusina. Sin embargo, nos atrevemos a decir que es mucho más que eso. Conocida por muchos como “La Bestia”, esta limo cuenta con lo mejor en tecnología y seguridad. Estamos hablando de un Cadillac de 1.5 millones de dólares, que se presentó en 2009 (al principio del primer gobierno de Obama).
La seguridad máxima, por supuesto, tiene un precio y más si se trata del vehículo presidencial. La Bestia, pesa aproximadamente siete toneladas debido a los páneles de protección que tiene y a lo gruesas que están las ventanas. Los vidrios, miden 13 cms de ancho y el tanque de gasolina tiene su propia “armadura” para evitar que se rompa en cualquier ataque. El coche, también está equipado con un sistema de alarma para incendios, cámara con visión nocturna y un mecanismo de seguridad especializado.
La limusina está equipada con un motor V8, y tiene una protección especial para protegerla en caso de ataque con armas nucleares ¿Qué les parece? ¿Son medidas necesarias, o “ligeramente exageradas?
Twitter: @MGHUBARD