Seguramente has visto las imágenes en redes sociales que muestran una nueva instalación escultórica creada por el artista hidalguense Chavis Mármol en la que un auto Tesla está siendo aplastado por una enorme cabeza estilo olmeca, generando un impactante choque entre la antigüedad y la actualidad.
Aquí te explicamos un poco qué hay detrás de la obra, así como la controversia que ha generado.
Dónde se llevó a cabo esta instalación artística
Primero, el espacio donde se colocó la obra del artista es Colima #71, un hotel de lujo con una fuerte apuesta al arte y al diseño, ubicado en la colonia Roma, en la Ciudad de México. Cerca de éste, se instaló la escultura… en un momento que fue captado en video, el auto Tesla fue puesto en un terreno baldío para después colocarle la enorme piedra tallada encima, destruyéndolo casi por completo.
Técnicamente hablando, esta obra artística es una instalación, ya que posee diferentes elementos que se reúnen, formando un concepto unificado y se colocan en un espacio específico, formando entonces una pieza de arte.
En este caso, siendo compuesta por el automóvil, un “ready-made” (un objeto que ya fue hecho, para otra finalidad no artística al cual se le dota un significado reflexivo por parte de un creador, con un mensaje específico – véase “The Fountain” de Marcel Duchamp, una de las obras más reconocidas en este estilo-) y una escultura similar a una cabeza olmeca, tallada en cantera de aproximadamente 9 toneladas.
La suma de ambos elementos y el mensaje retórico que entre ambos aportan, es lo que la convierte a su totalidad en una pieza artística única.
La polémica del Tesla y la cabeza olmeca
Ahora, todo el hype que ha generado este suceso ha desatado una serie de críticas y análisis no sólo sobre la creación de Chavis Mármol sino que ha suscitado un debate sobre la originalidad en los procesos artísticos.
El mismo creador, a través de su cuenta de Instagram critica a los que llama “los arqueólogos de la sabiduría que romantizan la genialidad” y exhibe imágenes que fungieron como inspiración para el desarrollo de este trabajo, entre los que muestra imágenes de obras de Jimmy Durham, a quien cita en su texto.
Sabemos que para que cualquier creación artística pueda ser reconocida como tal, debe de contar con un porcentaje de originalidad, en términos de ejecución, uso de color, técnica, aplicación, tamaño, perspectiva.
En este contexto, Baby Solís (@obrasdeartecomentadas), una de las líderes de opinión más relevantes de la escena del arte en México, abrió el debate sobre la pieza al mostrarnos dibujos/tatuajes de Bilis Negra, creados en 2021 y la pieza “Arqueológicas involuntarias” de El Gallo Morales, de 2022. Lejos de señalar un plagio por parte de Mármol, realiza una reflexión sobre los periodos de inspiración en los que todxs lxs artistxs recurren a investigaciones y búsquedas físicas y documentales para nutrir o solucionar sus procesos productivos, de los que como resultado, se obtendrán obras de arte nuevas.
El discurso de Chavis Mármol detrás de esta pieza es, en palabras del artista “trollear a Elon Musk y su nueva planta de autos en México, un meme a gran escala” y es que esta obra fue una comisión realizada con la ayuda de Colima #71, siendo ésta una de las últimas partes de la serie “Neo-tameme”, con la cual él aborda por medio del humor, una crítica al choque entre la última y más novedosa tecnología y el pasado mexicano, proveniente de ricas civilizaciones prehispánicas y cómo éstas últimas, permanecen por encima de los más innovadores avances tecnológicos mundiales.
Se erige un nuevo significado, en el que la tradición, la historia y el pasado de nuestro país, se sobreponen (y aplastan) al deslumbrante progreso.
¿Qué opinas? ¿Inspiración o referencia? ¿Ya la visitaste? ¿Qué sentiste al ver ese Tesla Serie 3 ser aplastado por uno de los íconos más representativos de las culturas prehispánicas? ¿Crees que esto es arte?
Por: Samuel Reyes
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