En un lugar como la CDMX las estaciones importan poco. Aunque hay vestigios de lo que éstas fueron en el pasado (aún tenemos esos hermosos días de jacarandas y el otoño sin duda siempre nos recuerda cómo las hojas caen para renacer los siguientes meses), esta megalópolis es más conocida por ser un lugar donde a las seis de la mañana te congelas y a las once no puedes con el calor.
Hay que sumarle que somos criaturas demasiado mimadas por el clima (todos conocemos al norteño que nos dice que no conocemos el calor y las fotos de Chicago congelado en invierno nos parece algo imposible de sobrevivir) y oscilamos entre los 12 y 25 grados centígrados, cualquier cosa fuera de esos números nos parece una abominación.
Por eso aprendemos a controlar nuestros cuerpos ante el frío, a salir con capas de ropa por si llueve, hace frío o hace calor y así poco a poco ser como las cebollas y quedarnos sin capas. Pero también debemos aprender a controlar nuestro hogar, ¡es más fácil de lo que crees! Estos consejos de Habittismo, expertos en decoración y hogar, te ayudarán a evitar pasar tus días en casa con los dedos de los píes congelados.
Tiempo de ventilación
Siempre será ideal ventilar nuestra casa ya que es un hábito muy positivo para mantener una buena salud. Por eso, te recomendamos abrir bien las ventanas por lo menos durante 10 o 15 minutos al día, recuerda hacerlo especialmente en las horas de sol para aprovechar sus rayos y retener más calor.
Cortinas térmicas
Serán tu mejor aliado para los fríos, ya que es una opción sencilla y no muy caras, te ayudarán a subir la temperatura de tu hogar. Te sugerimos que las abras en las horas de sol para que entre el máximo de calor y ciérralas por la noche, así, evitarás que, entre el frío.
Alíate con las alfombras
No olvidemos que el suelo es el elemento de la casa que mayor pérdida energética tiene, por ello, la mejor opción para el frío es colocar alfombras de lana o las de pelo largo para proteger frente a la humedad y reducir la pérdida de calor del suelo, además de que le darán un toque muy chic a tu hogar.
Utiliza el calor de los electrodomésticos
Sabemos que a la hora de cocinar se desprende ese calor agradable de nuestro horno, así que no lo dudes más y aprovéchalo ya que será muy efectivo para mantener una temperatura alta en la cocina, especialmente si mantienes la puerta cerrada.
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