Comer azúcar es uno de los placeres más grandes de la actualidad. Tanto que se convierte en una adicción. Aunque a veces parece imposible dejarla, no es así. Por raro que parezca, tan solo requiere de un plan adecuado para lograrlo de poco a poco. Recuerda que no se trata de no consumirla sino de hacerlo con responsabilidad para evitar que te genere una adicción o problemas en el cuerpo.
Aunque para el cuerpo no es algo que suela tomarse tan bien, es como si te quisiera auto sabotear al causar síntomas como depresión, ansiedad, confusión, antojos, dolor de cabeza, fatiga y mareos. Algo así como una protesta por quitarle esa pequeña adicción a tu cuerpo así que hoy te enseñaremos a que puedas lograrlo de poco a poco.
Remuévela de tu mesa
Lo primero es tratar de tener la menor de las tentaciones, para lograrlo quita el azúcar de tu mesa, alacena o cualquier lugar a la mano, en su lugar puedes optar por tener pequeñas porciones por si se requiere para cocinar o una visita pero no tengas todo en tus narices, eso ayudará a que incluso se te olvide y no sientas ese sentimiento de ponerle a todo lo que prepares.
Aumenta tu energía
Si quieres un motivo para dejarla, el azúcar nos vuelve lentos y torpes por lo que dejarla ayudará a que tu cuerpo sienta más energía, los alimentos no procesados son clave para conseguir en momentos como estos en donde decirle adiós a la azúcar, es prioridad.
Adiós a los productos procesados
Trata de ir eliminando de tu dieta los alimentos procesados como las galletas, jugos, cereales, harinas refinadas, pasteles, barritas de cereal y más. Esto hará que cuando menos lo pienses, su sabor dulces ya no quede dentro de tus alimentos favoritos sino se conviertan en uno más.
Tomar mucha agua
Este tip es muy bueno, es fácil confundir un antojo de dulce cuando en verdad el cuerpo está pidiendo agua para hidratarse por lo que cada que sientas ganas de algo dulce o sientas ansiedad por no comerlo, toma agua, eso incluso te ayudara a estar en un mood mucho más zen.
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