Cuando escuchamos la palabra “cannabis” muchos piensan directamente en drogas y sustancias psicoactivas. Pero con la creciente tendencia e información sobre el CBD, la conversación ha tomado un rumbo diferente y ahora lo encuentras en productos de skincare y salud. Lo que estamos viendo en todas partes, no es marihuana, es cáñamo, o más bien un compuesto derivado del cáñamo llamado cannabidiol o CBD.
Es diferente a su hermano controversial, el THC (tetrahidrocannabinol). El CBD es una molécula no psicoactiva de la planta de cannabis sativa. El componente se extrajo por primera vez de la planta en 1940, pero no logró mucha popularidad hasta el año pasado, cuando comenzó a aparecer en las etiquetas de bombas de baño, cremas, sueros, tratamientos para el acné e incluso protectores solares. Tiene tantos beneficios, que podría ser el ingrediente que transforme nuestra piel.
El CBD puede aplicarse sobre la piel (hablando de skincare) como también puede ingerirse. Nuestros cuerpos tienen un sistema endocanabinoide propio, es decir, estamos hechos para digerirlo. Si tu ingieres CBD en un suplemento o comestible, ingresa al torrente sanguíneo, llegando a los muchos receptores endocannabinoides del cuerpo. Si lo untas sobre la piel, actúa solo en la zona donde se aplica. Ninguna de las dos opciones te “pone high”, mientras no haya THC en el producto que utilices.
Los atributos más atractivos del CBD tópico son sus propiedades antiinflamatorias y analgésicas. Los científicos están encontrando más evidencia de que puede tratar la piel seca, la psoriasis y el eccema, razón por la cual el ingrediente está apareciendo en tantas cremas faciales, sueros y lociones corporales. Incluso algunas personas lo usan para aliviar las quemaduras solares. Uno de los estudios más recientes, realizado en 2014 por el Centro Nacional de Información Biotecnológica en E.U., muestra evidencia de que el CBD puede regular la producción de grasa de la piel, controlando eficazmente los brotes potenciales.
Otro beneficio del CBD en aplicaciones tópicas es controlar el dolor. Para las personas que no pueden, o no quieren tomar analgésicos, el CBD tópico reduce el nivel de dolor y reduce la hinchazón. Por eso lo vemos en tantos masajes y bálsamos, que se utilizan para las articulaciones doloridas o los músculos doloridos antes y después de los entrenamientos, como una alternativa a un Bengay. Las mismas propiedades hacen que el aceite de CBD también sea una opción de loción para masajes.
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