9 cafés en CDMX aprobados por un ciclista

Para los cycling clubs, los que no ruedan sin la dosis de cafeína necesaria, y los ciclistas clavados para quienes un desayuno con amigos es mandamiento… estos son algunos de los puntos de reunión favoritos: los cafés en la guía del que pedalea en CDMX (cortesía de nuestro amigo ciclista).

9 cafés en la guía de un ciclista en CDMX

Tal vez lo conoces por ganarse su muy merecido lugar entre los mejores pancakes en la CDMX; pero su sucursal en Santa Fe, con menú de brunch all day & takeout, dentro de Velominata  —a lado del Pavé Cycling Club—  es una pitstop ideal.

Sabemos que el ciclismo, cada vez más en tendencia, sucede al mismo tiempo que la creciente afición por el café de especialidad. Parece que saber tu tipo de extracción favorita es como elegir entre Rapea y Oliver Otto. Rutas es una barra de café con comida saludable y —además de ser una boutique y taller— sí, están como un club en Strava.

En este spot hemos visto personas haciendo home office, post runners, chicas pilates, reunión de amigos… y también ciclistas (probablemente el panqué de plátano con chocolate tenga mucho que ver por ser un irresistible para el carbload). 

En Av. Arteaga y Salazar, una panadería artesanal con delicias de masa madre escogió una ubicación idónea para atraer a cualquier ciclista que se mueve por Desierto de los Leones. Eso sí, si quieres alcanzar a probar una de las gloriosas galletas que venden en su ventanilla, debes llegar temprano (de otra forma, es probable que alguien con casco y maillot te haya ganado).

Como un proyecto en conjunto con The Service Course, este es el punto de encuentro en Polanco para ciclistas. Lo malo de ir a desayunar unos huevos shakshuka o una croncha en  Aúna Café (para cerrar la mañana de bici con broche de oro), es tener que resistirse a la tentación de entrar a una tienda de custom bikes y no salir sin un nuevo gadget o outfit.

Otro lugar entre la lista de cafés CDMX para cualquier ciclista. Este taller de bicis se encuentra en la Del Valle y ofrece un café 100% mexicano; lo preparan con diferentes métodos de extracción, como aeropress, chemex, v60, sifón japones, kalita, etc.

Más que un local de café es un club de ciclismo. Pero claro, todos están invitados a probar sus desayunos y menú de lunch para reunirse en un ambiente totalmente post rodada. Además de ofrecer los servicios de un taller, tienen tienda de bicicletas. 

Aquí no te sentirás como un extraño si no vienes vestido de ciclista, y es que Artemiga es para cualquier cliente que busca disfrutar un pan dulce con un cafecito… pero definitivamente en las mañanas es favorito para los que andan en dos ruedas. Tienen varias sucursales: Santa Fe, Jalapa, Virreyes y Reforma.

No me cansaré de recomendar una de las joyas escondidas de Santa Fe. Y si eres un ciclista que disfruta más un chai o matcha latte, este es el lugar (después de rodar o en cualquier momento del día). Por cierto, su café también es para los paladares más exigentes (no por nada tienen su propia tostadora y dan talleres).