Desde la antigüedad hemos entendido que los extremos son malos y que en la mesura de las cosas se encuentra el verdadero equilibrio. También sabemos que los que llevan las cosas al extremo son los que usualmente generan los verdaderos cambios.
Con estas dos cosas en mente es como debemos conocer al empresario tecnológico Bryan Johnson. El creador de Venmo (una de las apps más usadas en EUA para transferir dinero) se ha convertido en un gurú de la vida saludable y ahora busca ser uno de los primeros humanos en optimizar su cuerpo de tal manera que pueda vivir mucho más que el promedio.
Más allá de las dietas, los tratamientos de belleza o procedimientos para rejuvencer que mucha gente toma sin muchos datos, él ha creado toda una compañía (Blueprint) para que su cuerpo reciba exactamente lo que necesita para ir más lejos de mantenerse sano, él quiere rejuvenecer por completo. Estas ideas lo han llevado a tales extremos que ahora se ha convertido en noticia por intercambiar plasma de la sangre de su hijo y su padre.
Johnson emprendió una búsqueda etiquetada como “el primer intercambio de plasma multigeneracional del mundo”. Con su hijo Talmage, de 17 años, y su padre Richard, de 70, a su lado, los Johnson se dirigieron a Resurgence Wellness en Texas. Allí, el joven Talmage tuvo un litro de su sangre meticulosamente separado en plasma y otros componentes sanguíneos. Después de eso, Bryan recibió una infusión del plasma de su hijo y para completar el ciclo, el padre de Bryan recibió una parte de la sangre “rejuvenecida” de Bryan.
Aunque la Food and Drug Administration (FDA) expresa preocupaciones, señalando la falta de “evidencia clínica convincente sobre su eficacia”, la medicina tradicional ha aprovechado durante mucho tiempo los poderes de la infusión de plasma. Sin embargo, estos tratamientos se centran principalmente en enfermedades hepáticas, quemaduras y trastornos sanguíneos, en lugar de revertir el reloj del envejecimiento.
Para Bryan Johnson, esta experiencia no fue un experimento aislado. En su búsqueda para revertir el envejecimiento, el magnate tecnológico ha abrazado previamente las transfusiones de sangre. Sin embargo, esta vez, de donantes anónimos jóvenes que, según Bloomberg, Johnson examinó meticulosamente buscando parámetros de salud óptimos.
Todos estos tratamientos forman parte del Proyecto Blueprint, que le cuesta cerca de $2 millones al año. La empresa ofrecerá una mezcla de rutinas estrictas, medicamentos, ingesta calórica precisa y un monitoreo exhaustivo de métricas que van desde lo que tú puedes ver en tu smartwatch, hasta el número de erecciones nocturnas.
Johnson cree que su enfoque estratégico y basado en datos para el antienvejecimiento le ha otorgado el corazón de un hombre de 37 años, la piel impecable de un joven de 28 y el poder pulmonar de un adolescente. Aunque esto podría parecer demasiado bueno para ser verdad, Johnson está dispuesto a compartir sus metodologías, con la esperanza de que otros puedan obtener información de su enfoque vanguardista.
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