Aunque conocemos el pádel desde hace mucho tiempo, ha sido en años recientes que su popularidad ha explotado en México como lo hizo hace mucho en otros lugares como España o Estados Unidos, ¿cómo pasó esto si el deporte realmente nació en México?
El pádel es deporte de raqueta que combina fascinantemente elementos de tenis, squash y bádminton. Su historia es relativamente joven a diferencia de otros deportes, pero su expansión ha sido muy rápida. Fue en 1969 cuando el pádel hizo su debut en Acapulco.
En una de las épocas de oro para Acapulco, cuando era visitada por las estrellas más grandes de Hollywood, así como por empresarios de todo el mundo, Enrique Corcuera, el hombre acreditado con su invención, modificó una cancha de tenis existente, creando paredes cerradas y un área de juego mucho más pequeña en su casa en Las Brisas.
La creación de Enrique Corcuera fue inicialmente una pequeña actividad recreativa entre amigos. Sin embargo, uno de sus amigos, Alfonso de Hohenlohe, quedó encantado con el deporte y decidió introducirlo en Marbella, España. Ese país experimentó un aumento en su popularidad, y pronto evolucionó en un deporte reverenciado, acumulando una multitud de entusiastas y jugadores profesionales.
El pádel empezó a propagarse más allá de las fronteras de España en las décadas de los 70 y 80, principalmente a países latinos. Para los 90, su encanto llegó a otros continentes, y países de todo el mundo empezaron a abrazar este deporte encantador. Hoy en día, el pádel es el segundo deporte más popular en España y continúa creciendo en todo el mundo.
¿Cómo se juega el pádel?
El deporte se juega típicamente en parejas en una cancha cerrada, aproximadamente un tercio del tamaño de una cancha de tenis. Las reglas se asemejan principalmente a las del tenis, con ligeras modificaciones. Se permite que la pelota rebote en las paredes, añadiendo una profundidad estratégica y una dinámica única al juego.
El encanto del pádel se puede atribuir a su inclusividad y aspectos sociales. Permite la participación de jugadores de diversos niveles de habilidad, haciéndolo accesible a personas que tal vez no querrían atreverse a jugar tenis. La cancha más pequeña y el uso de paredes disminuyen el énfasis en la fuerza y priorizan la estrategia, haciéndolo atractivo tanto para novatos como para jugadores experimentados.
La creciente popularidad del deporte llevó a la formación de la Federación Internacional de Pádel en 1991, que promueve competiciones internacionales y el crecimiento global del pádel. Numerosos países ahora albergan campeonatos nacionales y la inclusión del deporte en los Juegos Panamericanos de 2019 marcó un hito significativo, simbolizando su aceptación y reconocimiento generalizados.
Hoy el pádel resuena con millones de personas en todo el mundo, con torneos profesionales que experimentan un aumento sin precedentes tanto en participación como en audiencia. La simplicidad y la dinámica del pádel lo han convertido en un deporte de estilo de vida, especialmente entre aquellos que prefieren deportes sociales pero de alto ritmo.
Incluso el Mundial de Pádel tiene distintos tours y México es uno de ellos. Este noviembre será especial, pues el tour llega a la CDMX con jugadores de todo el mundo para emocionar a todos los fans, tanto a los nuevos como a los veteranos que se han vuelto devotos de este deporte que nació en Acapulco.