El bótox es conocido como una arma de dos filos cuando de belleza se trata. Así como puede resultar milagroso, también puede terminar en fracaso si se utiliza de una forma equivocada. Ahora, el nuevo uso de esta revolucionaria sustancia es como tratamiento para regenerar el pelo dañado. Algunas de sus funciones principales son eliminar el frizz, aportar brillo, manejabilidad e hidratación, que normalmente se pierde cuando nos exponemos al sol, a la contaminación, a altas temperaturas y a los químicos.
La técnica de aplicación es similar a la de la queratina, ya que es necesario lavar muy bien con un shampoo especial para posteriormente secar y aplicar el líquido por secciones. El producto también se sella al pasar una plancha por cada mechón y se recomienda esperar un par de días antes de lavarlo.
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Afortunadamente este tratamiento es apto para todo tipo de pelo. En el que es liso se reduce la estática y se aumenta el brillo y suavidad, mientras que en el rizado reduce el frizz y aporta cuerpo. Los resultados duran aproximadamente de 30 a 60 días de acuerdo a la frecuencia de lavado. Asegúrate de ir con un profesional antes de aplicarlo, ya que si no se hace de la forma correcta los resultados pueden ser contraproducentes.
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