¿Sabías que debes limpiar tus cuarzos regularmente para mantener su estado purificador en equilibrio? Debido a que estas piedras sirven para regular la energía de personas o lugares en las que se encuentran, suelen tomar y almacenar mucha
Preparación: antes empezar, asegúrate de estar en un estado de ánimo tranquilo y relajado. Enciende algunas velas o incienso para ayudar a crear un ambiente sereno.
Cómo limpiar tus cuarzos
- Agua: Llena un tazón con agua tibia. Asegúrate de que el cuarzo esté completamente sumergido. Déjalo en el agua durante al menos una hora. Esto ayudará a eliminar cualquier energía negativa.
- Sal: La sal es un potente purificador de energía. Añade una cucharada de sal marina al agua y revuelve hasta que se disuelva. Deja el cuarzo en la mezcla de agua y sal durante la noche.
- Luz solar o lunar: Después de limpiar tus cuarzos con agua y sal, déjalos bajo la luz del sol o de la luna durante varias horas. La luz solar puede recargar los cuarzos con energía positiva, mientras que la luz de la luna puede ayudar a equilibrar su energía.
- Secado: Finalmente, secalos con un paño suave. Ahora están listos para ser usados de nuevo, cargados con energía positiva y limpia.
Recuerda que cada cuarzo es único y puede tener necesidades de limpieza ligeramente diferentes. Algunos, como la selenita, no deben mojarse. Asegúrate de investigar las necesidades específicas de tus cuarzos para mantenerlos en las mejores condiciones posibles.
Limpiarlos con frecuencia puede ayudarte a mantener un flujo constante de energía positiva en tu vida. Ya sea que los uses para meditar, sanar o simplemente como piezas decorativas, mantener tus cuarzos limpios y cargados es esencial para aprovechar al máximo su energía.
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