Denver es la mile-high city porque se encuentra exactamente a 1609 metros sobre el nivel del mar. La capital de Colorado inicia su peculiar historia con este dato curioso, pero no será el único. Rodeado de algunas de las montañas más hermosas de Norteamérica, Denver es una ciudad que cada vez más gente está optando por visitar, pues no solo es la puerta de partida para algunos de los destinos naturales y de aventura más espectaculares que podrás visitar, se trata de una ciudad en la que puedes hacer mucho.
La ciudad se ha transformado en los últimos años, pasando de ser mayoritariamente un destino para locales y gente del área de Colorado, Utah y Estados cercanos, a ser el centro de innovación de la zona. La escena artística y gastronómica, componentes esenciales de lo que hace llamativa a una ciudad para los jóvenes, ha crecido de manera sustancial en las últimas décadas, pero sin duda, tras la pandemia, estos cambios se aceleraron.
Muchas personas decidieron huir de grandes ciudades como Los Angeles, Nueva York o Chicago y optar por lugares rurales con mucho espacio para actividades al aire libre, sacrificando la amenidades y privilegios de ciudades como esa.
Denver se encuentra en medio de las dos opciones. Se trata de una ciudad con todos los lujos y servicios de una ciudad grande sin ser tan caótica y además cuenta con acceso a parques nacionales, ríos y mucho más, por lo que ahora es quizá uno de los destinos más importantes de Estados Unidos y uno que no te puedes perder en ninguna época del año.
Pronto te contaremos todo lo que puedes hacer en Colorado para divertirte, encontrando actividades que te cambiarán la vida a solo unos cuantos kilómetros de Denver, pero por ahora te recomendamos hacer esto mientras visitas la ciudad.
Cherry Creek North
Cuando visité Denver, me hospedé en el hotel Clio, un espacio para casi 200 habitaciones que sin embargo se siente como un hotel boutique con todos los lujos personalizados y con una oferta gastronómica que hará a cualquier latino extrañar casa, pues ahí está Toro, del chef Richard Sandoval.
Clio a su vez está dentro de Cherry Creek North, un distrito comercial de 16 calles donde se conjuga lo mejor para los amantes del shopping. Este espacio es reciente por lo que encontrarás las tiendas de lujo que están en tendencia, así como galerías, restaurantes, bares y más sin necesidad de transportarte en auto entre cada lugar. Cherry Creek North es perfecto para pasar un día descubriendo artistas locales e internacionales, comiendo y tomando en las terrazas y relajándote si quieres un día tranquilo.
Museos
La oferta artística en Denver es inmensa, pero nosotros queremos recomendarte dos que nos impresionaron. El primero es el Kirkland Museum of Fine and Decorative Art, un museo dedicado a las artes decorativas con una colección de cientos de miles de piezas que te cuentan la historia de objetos cotidianos que van desde el siglo XIX hasta nuestros tiempos. También tienen una exposición de Frank Lloyd Wright, uno de los arquitectos estadounidenses más importantes de todos los tiempos y es algo imperdible en tu visita a Denver.
El otro museo es el Denver Art Museum, un colosal edificio con exposiciones de talla mundial donde puedes a los grandes maestros del siglo XIX y XX, una exposición de armaduras y armas medievales que asombrará a todos, desde niños a adultos, una de las restrospectivas de arte de nativos americanos más importantes del país e incluso una exposición especial de la diseñadora y artista mexicana Carla Fernandez.
Fire en Art Hotel
El Art Hotel demuestra hasta donde llega la pasión por el arte para esta ciudad. El hotel está repleto de obras de grandes artistas, por lo que desde que dejas tu auto en el valet, ya estás rodeado de obras inmersivas. Fire es el restaurante que se encuentra en la terraza del hotel y sin duda tiene uno de los menús más eclécticos e imperdibles de Denver. Con una presentación contemporánea pero técnicas clásicas, el restaurante es perfecto para una cita en pareja o amigos que desean comenzar la noche con una gran cena y mejores tragos.
Bistro Vendome
Se dice que Denver tiene 300 días soleados al año, por lo que prácticamente en cualquier momento se puede caminar por la ciudad. Recorrer el centro para llegar caminando a Larimer Street donde se encuentra Writer Square (de lo que Jack Kerouack habla con detalle en su libro On the Road) es una odisea donde encontrarás malls, bares deportivos, tiendas de segunda mano y objetos vintage y hasta un restaurante de fine dinning mexicano llamado Tamayo.
Sin embargo, la joya de la corona ahí es Bistro Vendome, un restaurante francés que te transportará a la ciudad de las luces tan pronto cruces sus puertas. Con una sopa de cebolla para morir, cortes de carne presentados a la perfección y una carta de vinos que solo mejora tras la recomendación del sommelier, es el spot perfecto para despedirte de una ciudad como Denver.
Red Rocks
Alejándote un poco de la ciudad, pero aún parte de ella, está Red Rocks, un espacio para conciertos cuya belleza natural lo ha convertido en uno de los más hermosos del mundo. También es gracias a su posición geográfica que la acustica natural de las rocas lo hace uno de los lugares favoritos de los músicos. No por nada ahí han tocado las bandas más importantes del mundo incluidos The Beatles.
Red Rocks es un orgullo de Denver, y los locales lo visitan desde la mañana para algunas de las rutinas de ejercicio más intrépidas, para visitar el museo que tiene o para disfrutar de la vista en los pequeños senderos que parten de ahí. Es en la noche donde la fiesta inicia y la gente puede disfrutar de lo mejor de la música a nivel mundial.
Debe estar conectado para enviar un comentario.